Whatsapp ha sido noticia esta semana por una nueva técnica para conseguir tus datos personales y contratar servicios a tu nombre. Siempre echamos la culpa a los delincuentes pero para que su plan funcione sólo hace falta una persona digitalmente ignorante.
Whatsapp ha sido la estrella esta semana con una nueva forma de robo de datos tan sencilla que daban ganas de darle dos tortas a los afectados. Os adjunto captura de pantalla.
- Mensaje mal redactado
- Ofrece algo que hoy día es muy valioso (trabajo a jornada completa con un sueldo razonable y sin turnos de noche en hostelería)
- Urgencia en la petición
- Pide datos necesarios para hacer un contrato sin habernos hecho una entrevista
- Esa información en las manos equivocadas puede darnos muchos dolores de cabeza
La excusa para caer en ella en opinión de los internautas era que se aprovechaban de la necesidad de la gente. Mi punto de vista es dolorosamente cruel: las víctimas tienen en común que son digitalmente ignorantes.
Que quede claro que no me río de ellas ni me alegro de que les haya pasado. Que hay necesidad de encontrar trabajo es una verdad como un templo. Pero de ahí a dar información a alguien que no conoces de nada a través de Whatsapp me parece una temeridad tremenda. ¿Acaso le darías las llaves de tu casa a un desconocido? Pues cuando compartes tus datos personales con gente que no conoces les estás dando las llaves de acceso a tu vida.Que un ladrón acceda a tu casa es traumático, pero en general te puedes recuperar en poco tiempo. Sin embargo cuando alguien suplanta tu identidad puedes verte afectado gravemente durante años. Es evidente que el mundo está lleno de gente con buena fe (a pesar de lo que vemos en los medios de comunicación). Pero lo que a más del 90% de los internautas (y entiendo que la mayoría de los afectados) les ocurre es que no son conscientes de los peligros que nos aguardan en internet ni en el uso de la tecnología.
¿Acaso le darías las llaves de tu casa a un desconocido? Pues cuando compartes tus datos personales con gente que no conoces les estás dando las llaves de acceso a tu vida.
En la vida real tendemos a evitar situaciones de peligro:
- No le damos nuestro DNI a alguien que nos lo pide por la calle
- No vamos enseñando la cartera ni lo que hay en ella alegremente en público
- No le damos nuestros datos bancarios y claves de acceso al primero que nos lo pide en la calle
- No le damos nuestro DNI ni tarjeta de la seguridad social a nadie si no es un tema administrativo oficial y evidente
- No nos hacemos fotos ni videos sexualmente explícitos para dárselos en mano a gente desconocida (ni siquiera conocida)
- Cerramos con llave nuestra casa al salir
- No le damos las llaves a ningún desconocido y hasta cambiamos la cerradura cuando las perdemos
- Ponemos la alarma al coche al dejarlo aparcado y procuramos no dejar objetos de valor
- No nos paseamos por sitios solitarios a las tantas de la madrugada
- Desconfiamos de todo desconocido que se nos acerca a pedirnos ayuda o a darnos información
Sin embargo cuando se trata de internet…
- Nos parece normal mandar nuestro DNI por Whatsapp (o cuaquier otro tipo de medio de comunicación) alguien que no conocemos en persona para un trámite sin estar seguros de lo que estamos haciendo
- Nos parece normal que nos llamen o nos manden un e-mail de nuestra entidad bancaria o cualquier otra entidad oficial pidiéndonos nuestra contraseña cuando nos han avisado por activa (a la hora de darnos las credenciales en la oficina bancaria) y por pasiva (a la hora de mandarnos los productos/servicios a casa por carta postal) de que NUNCA NOS PEDIRÁN LAS CONTRASEÑAS
- Nos parece normal que para hacer algo gratuito nos pidan datos personales, contraseñas y números de tarjeta
- Nos parece normal no usar un antivirus en el móvil
- Nos parece normal no usar un patrón o pin de bloqueo para el móvil
- Nos parece normal entrar en nuestra cuenta bancaria usando redes wifi públicas
- Nos parece normal darle el DNI a cualquiera que nos lo pida a través de internet sin confirmar nada antes
- Creemos que la persona que acabamos de conocer a través del Whatsapp (o cualquier otro tipo de mensajería) JAMÁS NOS TRAICIONARÁ
Cómo ves, no se trata de convertirse de pronto en una mala persona y desconfiar de cualquiera que conozcamos por internet. Se trata de tomar medidas de seguridad y tener claro que…
“No todo el monte es orégano”
“Nadie da duros a cuatro pesetas”
“Todo lo que merece la pena cuesta trabajo y sacrificio”
Lo cierto es que el refranero español da para más consejos aplicables al mundo 2.0 Todo lo que tienes que hacer es preocuparte por tu seguridad y comportarte en internet y en las redes sociales de la misma manera que en la vida real.
Consejos que le doy a todos mis amigos
Son básicos. Es evidente que si alguien quiere conseguir tus datos acabará haciéndolo, pero el perfil tecnológico de esa persona será elevado y siempre se lo puedes poner un poco más difícil.
- Pon un buen antivirus en tu ordenador pero también en tu navegador
- Pon contraseña en tu sesión de usuario tanto en el tuyo personal como en el ordenador que compartes con más gente. NO es desconfianza. Es para evitar que otra persona cree una brecha de seguridad por donde puedan robar toda tu información
- Jamás le des información sensible a nadie (DNI, número de la Seguridad Social, datos bancarios, fotografías… )
- Crea contraseñas que no contengan fechas como tu cumpleaños
- No compartas públicamente fechas como aniversarios o cumpleaños de la familia
- No uses nunca la misma contraseña para todo. Puedes y debes memorizar las contraseñas. ¡Venga ya!… que venimos de una generación donde memorizábamos más de 50 números de teléfono con nueve cifras… Además, tu cerebro te agradecerá esta gimnasia mental
- Recuerda cerrar tus sesiones en ordenadores ajenos y propios
- Activa la recuperación de contraseña en dos pasos
- Activa la identificación en dos pasos para los servicios más sensibles
- Busca y apunta el IMEI de tu móvil en un sitio donde no se te vaya a olvidar
- No envíes nada a nadie que pudiera usar para chantajearte. Ni aunque sea tu pareja. Las venganzas de los ex pueden ser realmente dolorosas y humillantes
- Si recibes una invitación de un contacto para abrir un archivo que no esperabas, llama antes para confirmar que debes abrirlo
- Si recibes invitaciones de contactos de amigos que ya tenían cuentas en las redes sociales, mándales un mensaje para comprobar que han sido ellos quienes han abierto esos perfiles. Así, si no lo hicieron, podrán denunciar que ese perfil es falso y la red social lo eliminará
- Sospecha de cualquier mensaje que
- esté mal redactado
- el dominio (lo que viene después de la @ no coincide con el sitio oficial)
- ofrezca algo muy sencillo o jugoso (descuentos, bonos, dinero fácil…) Recuerda: si es fácil, no es legal
Pero si aun así hay problemas, dependiendo de lo ocurrido…
- Cambia todas las contraseñas
- Si te han robado el móvil y compraste un antivirus decente podrás bloquearlo en remoto, descargar toda la información y formatearlo, activar la cámara para tomar fotos (y con suerte conseguir una del caco), ubicar el móvil para ayudar a la Policía… Créeme, la inversión merece la pena
- Pon una denuncia en la Policía. Es cierto que la mayoría de las veces no sirve para nada pero de cara a que se contraten servicios en tu nombre o se usen tus datos para la compra de inmuebles o para bodas con inmigrantes sin papeles (por poner unos ejemplos), tener una denuncia demostrará que todo lo ocurrido no tiene nada que ver contigo
- Avisa a tus contactos de que si reciben un email o una invitación para abrir un archivo que tenga que ver contigo podría ser un virus
- Habla con la gente más cercana y explícales la situación para que te den cobertura
Resumiendo, no hace falta que te conviertas en una mala persona, dejes de usar móviles inteligentes y des de baja tus perfiles en redes sociales. Tan sólo sé consciente de cómo actúas y no escatimes en medidas de seguridad. Recuerda, una estafa tiene dos partes. No les hagas el juego.